¿Qué es el síndrome de boreout?
El síndrome boreout es una expresión utilizada en el ámbito de bienestar laboral y que usamos para definir el cuadro de desmotivación laboral en el que el empleado entra en un estado de aburrimiento crónico debido a una baja exigencia en la carga laboral o por la monotonía de las tareas.
Algunas causas que facilitan su aparición son:
- El puesto y las tareas del empleado no lo motivan.
- La realización de tareas monótonas y que no presentan ningún desafío para el empleado.
- Las funciones del puesto no están claramente definidas o son confusas.
- La empresa no cuenta con la participación de los empleados.
- Una cualificación incorrecta y no acorde con el puesto puede impedir que el empleado no logre cumplir sus objetivos con satisfacción a pesar del esfuerzo y lo conduzca a una situación de desmotivación.
- No se reconoce al empleado sus logros y el buen desempeño de su trabajo.
- La falta de promoción o subidas en el salario, hacen que el empleado asuma que por más esfuerzos que haga no obtendrá resultados.
Consecuencias del síndrome de boreout
Todo esto provoca una serie de efectos negativos tanto para la organización como para el empleado.
- Rompe el compromiso e implicación del empleado con la empresa.
- Empeora el clima laboral, ya que estos trabajadores aburridos, con falta de motivación provocarán un ambiente negativo y pesimista.
- Promueve el abandono de la empresa y la fuga de talento, ya que los empleados buscarán empresas y puestos que le permitan desarrollar sus capacidades.
- Disminuye la calidad del producto o servicio que la empresa ofrezca, ya que estas personas pierden el interés y la atención en las tareas que realizan.
Claves para prevenirlo
Para combatirlo es conveniente realizar un análisis crítico de la metodología de trabajo y revisar el desarrollo y tareas del puesto. Pueden ayudarnos algunas de las siguientes acciones:
- Aumentar el grado de autonomía del empleado.
- Definir claramente las funciones y rol de cada puesto.
- Facilitar los recursos, así como la información y formación necesarios para que el trabajador pueda llevar a cabo el trabajo y los objetivos a cumplir.
- Promover la participación de los trabajadores en la organización.
- Ofrecer flexibilidad horaria.
- Incluir programas dirigidos a la mejora de control mental y emocional.
- Mejorar la política de promoción en la empresa.
También es necesario cuidar nuestro estado emocional y confianza.
Y, por último, es importante preguntarnos por nuestros objetivos y prioridades laborales y siempre comunicar a los superiores si llegamos a un estado de desmotivación o disconfort laboral.
Fuentes y enlaces de interés:
Ficha de prevención UGT: El boreout o aburrimiento en el trabajo